En más de una ocasión habréis oído la frase “En mi imperio no se pone el sol” La pronunció un rey, Felipe II, aludiendo a la extensión de sus dominios; pero no fue él quien logró reunir tantos territorios y países. Los había recibido de su padre, el emperador Carlos V, el monarca más poderoso de su tiempo.
Los dominios de Carlos V llegaron a formar parte del conjunto de su imperio por diferentes razones. Por herencia recibió Castilla, las plazas del norte de África y las Indias (América, de su abuela materna, Isabel la Católica; la corona de Aragón, que incluía parte de Italia, de su abuelo materno, Maximiliano de Austria¸ los dominios de la casa de Borgoña, excluidos el ducado borgoñón e incluido Flandes, de su abuela paterna, María de Borgoña. Por cesión de su tío Segismundo recibió ciertas regiones alemanas. Finalmente, fue elegido emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Como es de suponer, gobernar tan extensos territorios, algunos de ellos tan lejanos como América y tan distintos exigía un esfuerzo sobrehumano. Después de muchos años durante los cuales recorrió miles de kilómetros, sostuvo enconadas batallas con temibles rivales, en especial con el rey de Francia Francisco I, y tomó trascendentales decisiones, el emperador cayó enfermo de gota en 1555. El 25 de octubre de este año, en presencia de toda su familia, Carlos V comunicó su intención de retirarse a un monasterio, y el 16 de enero del año siguiente abdicó a favor de su hijo Felipe. Aquel hombre, cuya fortaleza física y extraordinaria voluntad habían sido legendarias, ahora, agotado, se retiró al monasterio de Yuste, en Extremadura, y durante dos años hasta el día de su muerte, llevó una vida retirada, aunque no olvidaba los placeres de la buena mesa a los que era muy aficionado.
Fuente “Argos”
El 21 de septiembre de 1558, el que fuera el emperador más poderoso del mundo, alguien en cuyos dominios nunca se ponía el sol, murió en Yuste víctima del paludismo. Allí fue enterrado, según su expreso deseo, bajo el altar mayor de la iglesia, con medio cuerpo bajo las losas donde los monjes oficiaban misa para que el sacerdote pusiese los pies encima de su pecho y cabeza. Hoy sus restos reposan en el monasterio de El Escorial, donde su hijo Felipe II hizo construir el panteón de la realeza hispana.
También ocurrió en ese día:
27 a.C. – El Senado entrega Cayo Julio César Octaviano el sobrenombre de Augusto.
929 – En España, Abderramán III se proclama califa de Córdoba.
1605 – En Madrid se publica la primera edición de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha
1791- En Francia se crea la Gendarmería Nacional.
1900- Se disputa por primera vez la Copa Davis, máximo trofeo en tenis
1920- Entra en vigor en los EE.UU. la “ley seca”.
1946 – En Reino Unido, el niño prodigio español Arturo Pomar gana el torneo de ajedrez
1971 – En Chile fracasa un atentado pasa asesinar al presidente Salvador Allende.
1885 – Muere Edmond About, escritor francés.
1942- Muere Carole Lombard, actriz estadounidense.
1982 – Muere Ramón J. Sender, escritor español.